Qué mejor que hacer una presentación en mi blog, de unos seres que habitan en mi hogar desde hace algo más de quince días; un par de crías de tórtola.
El día 26 de mayo, al volver de una de mis últimas actuaciones en la temporada de comuniones de este 2013, ví que había restos de cáscara de huevo por la jaula, y entonces se barajaban dos opciones, había salido alguno de los pollos, o se les había roto algún huevo como en otras ocasiones, pero esta vez, por los cálculos la primera posibilidad era más factible, y efectivamente, aunque con dificultad y por supuesto sin tocar a la madre, divisé que existía un nuevo habitante en la jaula.
Al día siguiente, salió el segundo del huevo que quedaba aún, y tanto a mí como a mis hijos, nos gusta bastante ver el progreso hasta el día de hoy, que ya están los dos hermanos fuera del nido, y probando si funcionan sus alas; por supuesto simplemente las abren y las mueven, será para probar que todo el mecanismo está en estado optimo.
Cierto es que yo había visto esto más veces, porque mi pareja de tórtolas es bastante buena para estos menesteres, no sé si por suerte, o porque les dejo en paz cuando quiero tener crías, y ni les pongo pasta de cría, ni historias raras, simplemente la misma comida y agua, como todos los días. También hay gente que en cuanto nace alguno ya lo están tocando, incluso los huevos cuando los ponen, entonces tienen problemas luego para criar, porque como dicen en Carrascalejo y aledaños, "los aburren", y pasan de ellos.
Aquí os dejo unas fotillos a modo de resumen, y para tampoco ser un pesado, que es mejor no hartar al personal. Las fotos están hechas con el móvil, entonces la calidad es un poquito así de cualquier manera.
Saludos, y a pasarlo bien.
